Emery, tu turno

La próxima temporada Mestalla vivirá en un nuevo ecosistema sin Villa, y muy probablemente sin Silva, dos titulares de la mejor selección del mundo. En esas circunstancias Unai Emery se enfrentará al momento clave de su carrera en el que deberá demostrar que ha tenido más responsabilidad de lo que mucha gente piensa en el tercer puesto conseguido.

Un entrenador sobresaliente sabe sacar el máximo partido de sus futbolistas, es capaz de no depender de los goles de nadie, sino que inyecta en sus pupilos el gen de la victoria, el gen ganador. Siendo sinceros Unai despierta muchas dudas sobre si será capaz de armar un buen equipo con jugadores de un perfil inferior.

Para empezar no podrá repetir las rotaciones masivas. Si bien las dos temporadas anteriores el Valencia disputó la segunda competición continental, la Liga de Campeones exige que jueguen los mejores. Sin olvidar la Liga, "la competición que nos da de comer" según Emery. Se le plantea al técnico un rompecabezas que no podrá resolver como estaba acostumbrado.

Eso significa que con la vorágine de partidos vitales no podrá permitirse el lujo de jugar con tan sólo 14 futbolistas durante gran parte de la temporada. Será necesario distribuir la confianza, algo que hasta el momento no se ha atrevido a hacer.


Por último Unai Emery tendrá que ser ambicioso, y no sólo eso, deberá contagiárselo a la plantilla. Una segunda vuelta a domicilio como la pasada es el mejor ejemplo de conformismo peligroso que deriva en pasividad y holgazanería. Una muestra de deficiente dirección desde el banquillo.

Tras dos campañas Unai debería haber puesto los cimientos para que el Valencia que viene no se derrumbe. Con todo esto, la próxima temporada será un examen final para Emery, una análisis de su ADN que determinará si es un entrenador al nivel de Mestalla. Su particular prueba del algodón. Le toca dar un paso al frente, ya no podrá esconderse tras la calidad de sus estrellas. Ahora toca trabajar de verdad, apretarse el cinturón y transmitir personalidad y exigencia a un colectivo al que le espera un año lleno de retos.

PD: Por último, ya que hablamos de Emery, un vídeo con sus mejores goles en Primera División.

2 rajes:

Lobo dijo...

Unai es un mal gestor de recursos, no transmite liderazgo, no consigue contagiar ambición y seguridad. El Valencia está mal dirigido porque quien debe hacerlo no pasa de buen chico bienintencionado y responsable, pero hasta ahí. Un buen jefe es otra cosa,y más cuando se está en la élite de los jefes de vestuario. Espero sinceramente que demuestre lo contrario, pero no creo.

No conocía este blog que tiene muy buena pinta. Lo incluyo en mi lista. Un saludo.

Esteban Fernández dijo...

Creo que será una prueba de fuego para Emery la próxima temporada, durísima. Y tengo muchas dudas sobre si será capaz de sobreponerse y hacer un equipo sólido. De hecho pienso igual que tú, estoy más cerca de pensar que no lo conseguirá. Ahora bien, si lo consigue seré feliz.

Un saludo!